domingo, 24 de marzo de 2013



Domingo de Ramos, 24 de Marzo a las 11,30 de la mañana, un día espectante por la climatología que siempre amenazó lluvia, no pudo con el fervor y la fe almanseña, aquellas personas que no acompañaron a Jesús de la Paz, estaban esperando su entrada en Jerusalén, en nuestra Jerusalén mas cercana y que a todos nos llama, y que nos lleva junto a nuestra madre en la Parroquia de la Asuncion, María Santísima de Belén. Bien organizados, con tranquilidad y con la paz que derrama la contemplación de esta venerada imagen, que promete ganar incondicionales año tras año, se ha desarrollado la procesión del Domingo, anunciando la glorificacion de Nuestro Señor Jesús.

Jesús, entraba ganador en Almansa, El ha ganado el corazón de los cristianos almanseños, El adorna en lo mas alto de esta imagen el bullir de los sentimientos de armonia, El, hacedor y accionador de reflejos humanos, nos lleva en su representacion mas sencilla a compartir la sensacion de paz entre los hombres cuando junto a El desfilamos por la vida.

Ahí esta, aclamado, venerado, elegido por todos nosotros, esta imagen nos delata, nos confiesa cristianos. Hagamos ahora demostracion de honor salvaguardando nuestra manifestación no solo durante el día de hoy, no solo durante esta semana santa, si no para toda nuestra vida. Si hemos sido capaces de estar juntos en este día de victoria, luchemos por seguir juntos, para poder compartir días de gloria.

Fotografia:  LUIS BONETE PIQUERAS

viernes, 22 de marzo de 2013


PREGON DE SEMANA SANTA
ALMANSA  2.O13
 
SALUDOS.
Siempre es difícil comenzar algo.
Siempre es difícil servir, en cierto modo, de referencia.
Siempre es difícil estar aquí en una tribuna ante la atenta mirada de tanta gente.
Sin embargo, siempre es también fácil, si lo haces ante los tuyos, ante gente que sabes que te quiere…
Cuando Mari Sensi  me llamó para invitarme a hacer este pregón y la insistencia posterior  de mi buen Manolo López, surgieron en mí varios sentimientos. El primero, un cierto temor  ante la propuesta. Después consideré casi una osadía el aceptar y, finalmente, un cierto orgullo al pensar que en Almansa todavía se me recordaba y se seguía contando conmigo. Al final, quedé tan envuelto del optimismo que irradiaban Mari Sensi, Manolo  y, después J. Miguel Belotto que no tuve más remedio que aceptar complacido el encargo.
Almansa significa mucho, como bien sabéis, en mi vida y en la vida de mi familia.
Aquí comencé a trabajar en una profesión maravillosa, al igual que Ana Mari, mi mujer y mi guía permanente.
Aquí pude saborear la grandeza de una profesión como es la enseñanza y mi dedicación en cuerpo y alma a la tarea no  sólo de enseñar, sino de “educar “ a un colectivo de chicas y chicos .
La verdad es que tuve la inmensa suerte de contar  de contar con un colectivo extraordinario de compañeros, alumnos y padres.
Y fue primero el Episcopal, sede de mis mejores y más ambiciosas pruebas de mi tarea educativa.
Después el Pemán, que sólo aguantó ese año antes de su demolición.
Y estrenamos el Príncipe, que significó una revolución en mi vida. Fueron  años en los que hubo momentos felices difíciles de olvidar junto a toda la comunidad educativa.
Y aquí me casé  y aquí nacieron y dieron sus primeros pasos  nuestros hijos Manuel y Ana.
Y, también aquí, mis flirteos con la música. Con “mis coros“  y con una aventura y una historia vivida tan intensamente como fue la creación de SIEMBRA. Es difícil de explicar algo que marcó profundamente tanto la vida de aquellos jóvenes inquietos como la mía y la de mi familia.
Y todo ello a la sombra de algo tan importante como el Castillo  y también en el regazo de una madre que acunaba y acuna día a día a todos los almanseños.
“Almansa postrada te aclama, Virgen de Belén…”, dice su himno.
Aquí y ahora quiero yo ser tu humilde VITORERO.
Y postrado quisiera que este pregón pudiera ser un pequeño aldabonazo en cada uno de vuestros corazones.
¿Y qué pregonamos?
El Misal de la Comunidad del Domingo de Ramos dice:
“Hay hombres buenos en el mundo. Hombres que se despojan, que son capaces de vivir en solidaridad, que cargan con las vejaciones de los oprimidos hasta perder trabajo, libertad (…).
La pasión del Señor es una muestra inigualable de que el verdadero camino de la perfección del hombre es el amor a los demás, hasta ser capaz de dar la vida por ellos. La firme convicción de la fe cristiana proclama que “quien pierde su vida la gana para siempre.”
Esta pasión por los demás ha hecho que yo hoy esté aquí.
Hermanas, hermanos, cofrades, costaleras y costaleros de la Archicofradía de la Real e Ilustre Esclavitud con su amor, devoción y dedicación a vuestro querido Jesús de Medinaceli,  la Dolorosa y al Cristo de la Buena Muerte; y la Hermandad  y Cofradía de Nuestro Padre Jesús del Calvario y María Santísima de la Esperanza han hecho carne de su carne y sangre de su sangre este mandato de amor a los demás. Han cargado sobre sus hombros la enorme y dulce tarea de hacer que Almansa viva su Semana Grande, su Semana Santa con mayor fervor e intensidad. Que cada  almanseño o almanseña se sienta estos días un cofrade más, un hermano más. Y que la ilusión de su esfuerzo y trabajo contagie a todos aquellos que todavía “sienten” que Jesús se lo merece.
Estoy seguro de que a todos ellos les gustaría vivir la experiencia extraordinaria que el gran Francisco de Asís nos narra en su libro Florecillas (Llagas V):
[Estampa antigua de San Francisco de Asís]
“Comencé a contemplar devotamente el desbordado amor de Jesús  crucificado y el desmesurado  dolor de su pasión. Su vista engendró en mí tanta compasión, que me parecía sentir  propiamente aquellos dolores en mi cuerpo, y con su presencia  todo este monte resplandecía como el sol (…). Después de algún espacio, Cristo partió y se volvió al cielo, y yo me quedé señalado con estas llagas”.
Dice una homilía pascual de autor desconocido:
Podemos  decir que la Pasión del Salvador es la salvación de la vida de los hombres. Para esto quiso el Señor morir por nosotros, para que, creyendo en El, llegáramos a vivir eternamente. Quiso ser por un tiempo lo que somos nosotros, para que, participando de la eternidad prometida, viviéramos con El eternamente.
Esta es la gracia de estos sagrados misterios, este es el don de la Pascua, este es el contenido de la fiesta anhelada durante todo el año, este es el comienzo de los bienes futuros”.
Esta es la base fundamental para entender la Semana Grande, la Semana Santa: el proyecto de Jesús a través de de su Vida, Pasión y Muerte y Resurrección.
No es posible quedarnos en una sola, hay que contemplar las tres.
Dentro de unos días celebraremos una fiesta.
Jesús, sólo unos días antes de morir, promovió una entrada festiva y multitudinaria en Jerusalén. De carácter y formas plenamente mesiánicas (el pollino, los mantos alfombrando el camino, el grito de hosanna y las aclamaciones al hijo de David y al Reino que llega).
Esta entrada tuvo poco que ver con el Mesías victorioso sobre sus enemigos que imaginaba el pueblo.
Fue la entrada de un Mesías de paz.
Poco podíamos imaginar que los que gritaban alegres, días después, gritarían otra consigna…
Jesús, la tarde anterior a su pasión, quiso celebrar  la Pascua con sus amigos. Fue una cena de despedida y fue una cena dolorida.
Jesús, a través de palabras, de gestos y signos misteriosos, manifestó su testamento espiritual.
Todos lo recordamos con la palangana y la toalla ceñida a la cintura lavando los pies a los discípulos…
El que era el más grande se propone como modelo de acción.
Todos recordamos el “Tomad y comed…”
Día grande, día de Eucaristía, día en que nos alimentamos con su cuerpo y sangre. Todos los días podemos hacerlos Jueves Santo, si queremos…
Amor  enamorado,
Un amor roto en mil pedazos,
Comed mi amor, comedme a mí,
Así poquito a poco, saboreando.
Tiene del cielo y tierra vitaminas,
Alimento completo e inmortal medicina.
En el seno de una Virgen amasado y sazonado,
En el horno del Espíritu cocido,
por golpes enemigos dividido,
y en manos amistosas ofrecido.

Es un pan bello, inmenso, nutritivo,
Peso de gracia, huele a resurrección,
Se come en el banquete del Reino,
Y sabe a Dios.

Comed mi pan hasta saciaros,
Comed mi pan hasta entrañarlo,
Comed mi pan hasta la Pascua,
Y así, resucitados, haceos pan.[La+Ultima+Cena+de+Jesus.jpg]
Y también recordamos “entre vosotros está el que me entregará…”
¡Qué dolor debió sentir…!
El paso del  Jueves al Viernes es Getsemaní, la oración en el huerto. Quizá sea el momento más difícil pera Jesús de toda la Pasión.
Getsemaní es el sufrimiento del alma, es oscuridad y turbación, es angustia y agonía. Agonía significa lucha  intensa, y en esa lucha su sudor se hizo como gotas espesas de sangre que caían en tierra.”
¿Y sus  amigos?
“Los encontró dormidos…”
¡Qué desilusión!
Y después una noche llena de insultos y desprecios, que nos conducirá a la Cruz, al crucificado.
La crucifixión era un espectáculo inhumano. Pero, desde que Cristo murió en ella, la cruz es gloriosa y fuente inagotable de inspiración, veneración y oración: “Victoria tú reinarás, oh Cruz, tú nos salvarás…”, dice el canto litúrgico.
La contemplación de Jesús en la cruz ha sido capaz de inspirar un soneto anónimo de lo más bello que se escribió en nuestro Siglo de Oro y que hoy quiero recoger como culminación del Viernes Santo:
“No me mueve, mi Dios, para quererte
El cielo que me tienes prometido
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
Clavado en la cruz y escarnecido;
Muéveme ver tu cuerpo tan herido;
Muéveme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
Que, aunque no hubiera cielo, yo te amara
Y, aunque no hubiera infierno, te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera;
Porque, aunque lo que espero no esperara,
Lo mismo que te quiero te quisiera.
Si nos adentramos  en lo más hondo del misterio de Cristo crucificado, encontraremos la fuerza infinita del amor misericordioso. El mismo nos dijo: “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos”.
El Sábado acentúa la figura emergente de María en este cuadro pintado con la sangre de su Hijo y que está teñido de sangre de azotes, de espinas y de clavos.
Es el día de María de los Dolores, nuestra  Dolorosa bella y querida y de la Soledad por la muerte de su Hijo, pero también de la Esperanza.
María junto a la Cruz “estaba”.
Otros no estaban, habían huído.
Otros estaban físicamente, pero muy lejos espiritualmente.
Ella “estaba”, bien cerca, compenetrada, en comunión
Muchos entraban y salían, como ante un espectáculo.
Ella estaba en pie, “era la madre, la mujer”.
Podía avergonzarse, porque a su Hijo lo insultaban;
Lo habían condenado, y moría horriblemente  entre malhechores.
Ella estaba, serena  y con toda dignidad.
Ella sabía la verdad. Mujer de fe.
Columna de la Iglesia.
Podía gritar, rebelarse, rasgar sus vestidos,
Como tantas  mujeres y madres.
Pero ella sabía que  eso no servía, Ella asumía todo el dolor del Hijo como suyo y “estaba”.
Allí estaba, no crucificada, pero sí traspasada por la espada de dolor.
Y estaba ofreciendo su dolor con el dolor de su Hijo.
Redimiendo con el Hijo.
Cuando María contempla a su hijo muerto y roto, ¿qué otra cosa puede hacer que besar, besar, besar… y lavar las heridas con sus lágrimas piadosas?
María vive intensamente la soledad, al sentir el enorme desgarro de la muerte del Hijo. Juan ahora no lo podía suplir; con el tiempo algo le podrá aliviar.
María penetró en el misterio de “la soledad”, uniéndose así a Jesús cuando experimentaba el abandono del Padre: “¿Por qué me has abandonado?”. Esta angustia fue para Cristo como un infierno, porque destruía su identidad filial. Pues algo así sufrió María, destrozada cruelmente su maternidad, que era su verdadera razón de ser.
Aprendía a ser madre de muchos hijos.
La Virgen aprendió a estar sola para que nadie se sintiera solo. María proyectará su presencia sobre todos  los que sufren la herida dolorosa de la soledad.
Para María “la esperanza” era firme, como una luz en el horizonte. Esa esperanza la mantenía en pie, pero Cristo aún no había resucitado. Era una esperanza, no un hecho.
Para nosotros, que creemos en la resurrección, sabemos que todos resucitaremos, pero es una esperanza. Y esta esperanza ilumina nuestras vidas. Lo mismo que la fe no quita las dudas, la esperanza no quita los temores.
¡Virgen de la Esperanza, consuélanos y confórtanos¡
Pero el proyecto de Jesús no debe ni puede quedar en la Cruz. Si así hubiera ocurrido hubiera sido un fracaso. Cristo con su muerte da paso a la fiesta más grande de la Iglesia: la celebración de la Pascua, la Resurrección…
La liturgia denomina esta celebración como la Noche Santa y en su celebración se dice de esta noche: “Ahuyenta los pecados, lava las culpas, devuelve la inocencia a los caídos, la alegría a los tristes, expulsa el odio, trae la concordia, doblega a los poderosos…”
Ahora se impone victoriosa la vida nueva  de Cristo resucitado.
Cristo nos resucita de la tristeza, de la desesperanza, del vacío. Cristo nos resucita de la esclavitud, del vicio, de la maldad. Cristo nos resucita, sobre todo, del desamor. El que no ama está muerto. Vivir consiste en amar.
Esta es la noche de la que estaba escrito:”será la noche clara como el día, la noche iluminada por mi gozo. Ya no hay noche, porque los poderes de la noche fueron derrotados”. Ya todo será luz, porque Cristo es el sol que no se apaga e irradia gozo y vida. Cristo es el Día, “lucero que no conoce ocaso y brilla sereno para el linaje humano”. Nuestro cielo estará siempre despejado.
Este es nuestro reto para la Semana Grande: vivir, sentir, orar…
Quiero terminar con un deseo, sacado no de grandes libros ni de grandes escritores cristianos, sino  de un gran músico, porque ellos, también nos aportan hermosos mensajes. Es una canción de Bob Dylan.

DIVINA JUVENTUD
Que Dios os bendiga  y proteja siempre.
Que vuestros deseos se hagan realidad.
Que ayudéis siempre a los demás
y dejéis que los demás os ayuden.

Que construyáis  una escalera hasta las estrellas
Y la subáis peldaño a peldaño.
Que vuestras manos estén siempre ocupadas.
Que vuestros pies estén siempre dispuestos.
Que vuestros corazones estén siempre alegres.
Que vuestra canción sea siempre cantada.

Que permanezcáis por siempre jóvenes,
por siempre  jóvenes.

¡GRACIAS!

Pregonero 2013: D.ARGIMIRO MARTINEZ JAREÑO

Fotografia "La borriquita" LUIS BONETE PIQUERAS
Fotografia "La Dolorosa" JAVIER MACIA SANCHEZ











lunes, 18 de marzo de 2013


IV CERTAMEN DE DIBUJO Y PINTURA SEMANA SANATA 2013



BELEN ALBERTOS VIZCAINO  1º ESO  ESCLAVAS DE MARIA



 JAIME PARDO GARCIA   2º CICLO DE PRIMARIA ESCLAVAS DE MARIA
 MARIA PARRA GUILLEN  3º CICLO DE PRIMARIA   COLEGIO ESPICOPAL

ANDRES CANDEL MARTINEZ    ACCESIT  ESCLAVAS DE MARIA

sábado, 9 de marzo de 2013

Parroquia de San Isidro, viernes 8 de marzo, cuando son las 20,30 h comienza el acto de presentación de la revista y el cartel de la semana santa almanseña. Toma la palabra el vicepresidente de la agrupacion interparroquial. D Manuel Lopez Diaz, que tras una bienvenida agradeciendo la asistencia a los presentes, disculpa la ausencia del Sr Presidente y comunica que ejercerá esta tarde de moderador del acto.
En primer lugar cede la palabra a la secretaria Srta. Natividad de Ves, que con brevedad y concisión informa sobre el cartel oficial que anuncia la semana santa: <<< la autoríade la fotografia protagonista es deD Luis Bonete Piqueras y representa la imagen de Nuestro padre Jesús de la paz en su entrada triunfal en jerusalén, ( la Borriquita), cofradia de reciente creación en almansa y que el año pasado complemento su salida a las calles de la localidad con esta talla de autor anónimo, articulada y montada sobre un pollino, en donde resalta sus humildad en el rostro de la misma y las vestiduras ad hoc, de tipo hebreo- semita>>>
Seguidamente, D. Manuel informo de la realización del pregón recordando su fecha, próximo sábado 16 de marzo a las 20,00 h en el teatro principal, y anunciando que correrá a cargo de D Argimiro Martinez Jareño, del cual reseño su implicación con la ciudad de almansa en años de docencia en distintos centros de la localidad, así como en la actualidad su devoción por los mas necesitados desarrollando en Caritas de Villarrobledo su actividad como presidente, ciudad de la que fue nombrado hijo predilecto e ilustre.
Informo sobre la revista, agradeciendo la colaboración prestada por las distintas agrupaciones religiosas de la ciudad y de particulares, con especial mención a la corporación municipal por su implicación en el proyecto a la hora de publicar y distribuir el documento gráfico, y destaco los cambios mas significativos para esta programacion anual, que recaen en la modificación del itinerario de la estación penitencial del miércoles santo y el horario de la salida del viernes santo, ambas organizadas por la cofradia de medinaceli advirtiendo de la mejora que esto supone a efectos de organizacion global.
Como viene siendo costumbre tomo palabra D Ramon, párroco de la Asuncion y consiliario de la interparroquial y no obvio el momento para transmitir su mensaje mas reflexivo desde el cual nos razono el significado de esta expresion publica de fe:<<< no es un mito, no es una leyenda, es un mensaje actual integrador del ser humano en la sociedad civil y religiosa>>>.
Por ultimo el moderador de la mesa dio turno al D Luis Bonete Piqueras, que emocionado comento su impresión sobre el cartel y su obra, de la cual dijo: <<< en lo mas hondo del corazón, mientras realizaba el reportaje fotográfico de esta novedad almanseña, (la imagen de la borriquita en mas de 400 exposiciones fotográficas), encontré los recuerdos vivos e intimos de mi infancia en los salesianos de Villena>>>

martes, 5 de marzo de 2013



PREGON DE SEMANA SANTA

Anunciaros que el proximo dia 16 de marzo a las 20,00 h tendra lugar el el Teatro Principal, la celebracion del Pregon de Semana Santa y la entrega de premios del IV concurso infantil de pintura.
EL PREGON en esta ocasion sera realizado por D. ARGIMIRO MARTINEZ JAREÑO, Exprofesor del Colegio Episcopal y colaborador infatigable de CARITAS en Villarrobledo.



PRESENTACION DEL CARTEL OFICIAL Y LA REVISTA DE SEMANA SANTA PARA ESTE AÑO 2013.
LUGAR: PARROQUIA DE SAN ISIDRO
HORA:   20,30 HORAS
DIA:        VIERNES 8 DE MARZO DE 2013